TAMPA, Fla. (WFLA) – Una madre de Florida que mató de hambre a su hijo fue declarada culpable de asesinato en primer grado, informa WBBH.
El niño, Ezra O’Leary, tenía solo 18 meses cuando murió mientras dormía en Cape Coral en septiembre de 2019.
El niño pesaba solo 17 libras en el momento de su muerte, que es siete libras por debajo del peso promedio para un niño de su edad. La evidencia mostró que murió de desnutrición y deshidratación, según el informe.
Las autoridades notaron que otros tres niños en el hogar, de 3, 5 y 11 años, también sufrían de desnutrición severa y deshidratación.
Los padres del niño, Sheila O’Leary y Ryan Patrick O’Leary, fueron arrestados.
Según WPLG, la pareja le dijo a la policía que su familia seguía una dieta vegana estricta que consistía solo en frutas y verduras crudas. También alimentaron a su hijo con leche materna, pero él no comió nada durante la semana previa a su muerte, dijo Sheila O’Leary, según el informe.
Sheila O’Leary fue declarada culpable de asesinato en primer grado, abuso infantil agravado, homicidio involuntario agravado, abuso infantil y dos cargos de negligencia infantil. Su sentencia está programada para el 25 de julio y enfrenta cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Se espera que Ryan O’Leary vaya a juicio a finales de este año.