TAMPA, Fla. (WFLA) – El ataque al adolescente de 16 años, de origen venezolano, ocurrió a finales de octubre en una escuela de Kissimme, pero solo hasta esta semana salió a la luz pública, generando todo tipo de reacciones en las redes sociales.
La madre del menor, Merlyn Carrillo, nos dijo lo que sintió al momento de ver la grabación. “Cuando lo vi quedé destruída, impactada”.
Dice que nunca imaginó que su hijo correría peligro. “Indignada ¿porque sabes qué? Uno deja a sus hijos en el colegio pensando que están seguros”, destacó.
Carrillo nos confesó que era la tercera vez que el menor recibía ataques de las mismas personas, pero que no había contado nada por temor a represalias. “Él estuvo amenazado y no fue él el que sacó eso a la luz, lo sacó otra persona”.
El alguacil de Osceola, Marcos López, dijo que los implicados recibieron cargos y que continúa la investigación. Aprovechó para enviarle un mensaje a los estudiantes en general. “No necesitan tolerar estos hechos y convertirse en víctimas de la delincuencia. Estamos aquí para ellos”.
Pese a la acción policial, Carrillo dijo que la familia no se siente segura, viéndose obligados a dejar la escuela, abandonar su hogar y refugiarse en un hotel de la Florida Central. “Ellos desestabilizaron mi vida y la de mi hijo”.
Unas implicaciones mucho más graves que un golpe, sobre todo para su hijo, quien fue tratado durante años por déficit de atención e hiperactividad. “9 años yendo cada miércoles a que mi muchacho mejorara. Y ellos en un minuto le quitaron toda la tranquilidad a mi hijo. Eso no es así. La gente tiene que ayudarme”.
Carrillo pidió a las autoridades dos cosas en particular. Seguridad para ella y para su hijo mientras se lleva a cabo la investigación y justicia para que este tipo de crímenes no queden impunes.