ORLANDO, Fla. (AP) – La familia de una estudiante universitaria asesinada dice que un oficial descartó las pistas que deberían haber impedido que el hombre ahora sospechoso de matarla se alejara, días antes de que lo encontraran muerto por un aparente suicidio.

El alguacil del condado de Orange, John Mina, defendió la investigación de su agencia sobre la desaparición de Miya Marcano, de 19 años. Su cuerpo fue encontrado atado con cinta adhesiva una semana después de su desaparición, y el abogado de la familia dice que no saben cuándo murió.

El abogado asegura que el oficial tenía pruebas suficientes para detener a Armando Caballero, de 27 años, a quien grabaron en video haciendo declaraciones sospechosas a las autoridades.